Puedes aumentar tus probabilidades de concebir un embarazo sano y seguro si sigues estos simples pasos.
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Ingiere ácido fólico
Mientras intentas quedar embarazada, y al menos durante 12 semanas después, es recomendable tomar un suplemento de 400 microgramos de ácido fólico.
Un microgramo es 1.000 veces más pequeño que un miligramo (mg) y se suele escribir con el símbolo griego μ seguido de la letra g (μg).
El ácido fólico es útil para disminuir las probabilidades de que a tu bebé lo acompañe un defecto del tubo neural, como la conocida espina bífida.
Un defecto del tubo neural surge cuando hay un desarrollo anormal de la médula espinal del feto, es decir, cuando esta parte del sistema nerviosa se forma inadecuadamente.
Se recomienda que las mujeres que padezcan epilepsia, diabetes y otras afecciones tomen suplementos de 5 miligramos (mg) de ácido fólico.
El ácido fólico se puede comprar en farmacias, aunque también te lo puede recetar tu médico de cabecera.
Si te quedas embarazada por sorpresa, puedes comenzar a tomar estos suplementos tan pronto como te intereses, hasta que superes las 12 semanas de embarazo.
Dejar de fumar
Fumar se relaciona con un gran abanico de problemas de salud, entre los que se encuentran:
- Nacimiento prematuro
- Bajo peso al nacer
- Síndrome de muerte infantil súbita (SIDS, por sus siglas en inglés) – también conocido como muerte en la cuna
- Aborto espontáneo
- Problemas respiratorios o sibilancias en los primeros 6 meses de vida
Dejar de fumar es fácil si cuentas con el apoyo necesario.
Busca ayuda gratuita, apoyo y consejos para dejar de fumar, especialmente si estás embarazada, ya que así podrás encontrar los detalles sobre servicios de apoyo locales.
El humo de los cigarrillos de otras personas también puede ser perjudicial para tu embarazo, de modo que es importante pedirle a tu pareja, familia y amigos que fumen lejos de ti.
Elimina el alcohol
Evita beber alcohol si estás embarazada o planeas estarlo. El alcohol se puede transmitir a tu bebé.
Las autoridades sanitarias recomiendan que lo mejor es que no beber ni una sola gota de alcohol.
Beber alcohol mientras que estás embarazada puede causar daños a largo plazo a tu bebé, de modo que a mayor cantidad ingerida, mayor es el riesgo de sufrir problemas.
Mantén un peso saludable
El sobrepeso puede acarrear problemas a la hora de quedar embarazada y puede reducir la eficacia de los tratamientos de fertilidad.
Tener sobrepeso (tener un IMC superior a 25) u obesidad (tener un IMC superior a 30) también incrementa las probabilidades de presentar problemas durante el embarazo, como la hipertensión, los coágulos de sangre, los abortos espontáneos y la diabetes gestacional.
Puedes usar una calculadora de peso saludable para averiguar tu IMC si planeas quedar embarazada. Si ya estás embarazada, consulta con tu médico de cabecera o ginecólogo.
Durante el embarazo se recomienda mantener una dieta sana y equilibrada y realizar ejercicio moderado una dieta saludable para evitar subir demasiado de peso.
Un peso adecuado se consigue cuando realizas ejercicio y mantienes una dieta saludable.
Toma las medicinas adecuadas
Hay algunas medicinas que debes evitar durante el embarazo, tanto por prescripción médica como las que puedes comprar sin receta en una tienda o farmacia.
Consulta con tu médico si estás bajo algún tratamiento recetado pero piensas en quedarte embarazada, pero no dejes de tomar ningún medicamento sin antes hablar con tu médico.
Prepárate para las vacunas y evita infecciones
Existen varias infecciones (como la rubéola o sarampión alemán) que pueden dificultar tu embarazo si se contagian mientras esperas tu bebé.
La mayoría de las personas en España son inmunes a la rubéola gracias a la vacunación contra el sarampión, las paperas y la rubéola (MMR).
Pídele a tu médico de cabecera que compruebe tu historial de vacunación para verificar que has recibido 2 dosis de la vacuna MMR si no estás totalmente seguros de haberlo hecho.
En caso de no haber recibido ambas dosis o no existe un registro disponible, puede recibir las vacunas en la consulta de tu médico de cabecera.
Debe evitar quedarse embarazada durante 1 mes después de recibir la vacuna MMR, lo que significa que necesitará un método anticonceptivo confiable.
Averigua sobre aquellas infecciones durante el embarazo que pueden perjudicar a tu bebé y qué soluciones existen para reducir el riesgo de contraerlas, como el citomegalovirus (CMV), el parvovirus (la enfermada del niño abofeteado) y la toxoplasmosis.
Ten en cuenta tus condiciones a largo plazo
Si padeces de alguna afección a largo plazo, como la epilepsia o la diabetes, esto podría afectar al curso natural de tu embarazo y a las decisiones que tomes respecto a él, por ejemplo, dónde podrías querer dar a luz.
Aunque lo normal es que no haya nada que impida que tu embarazo sea fluido y tu bebé nazca sano, existen algunas condiciones de salud que necesitan ser gestionadas para reducir al mínimo los riesgos tanto para ti como para tu bebé.
Antes de quedar embarazada, consulta con un especialista o habla con tu médico de cabecera sobre el embarazo.
Si estás tomando medicamentos para una afección, no deje de tomarlos sin consultar a su médico.
Hay algunas cosas que necesitarás saber durante tu embarazo:
- Asma y embarazo
- Diabetes y embarazo
- Epilepsia y embarazo
- Enfermedad cardíaca o defecto cardíaco congénito
- Presión arterial alta preexistente y embarazo
- Problemas de salud mental y embarazo
- Sobrepeso y embarazo
Realiza las pruebas para detectar células falciformes y talasemia
La enfermedad de células falciformes (SCD, por sus siglas en inglés) y la talasemia son trastornos sanguíneos hereditarios que afectan principalmente a personas cuyos ancestros provienen de África, el Caribe, el Mediterráneo, India, Pakistán, el sur y sureste de Asia y el Medio Oriente.
A las mujeres embarazadas en España se les ofrecen pruebas de detección para estos trastornos, pero no es necesario esperar hasta estar embarazada para poder realizar estas pruebas.
Si tú o tu pareja pensáis que podríais ser portadores de uno de estos trastornos, ya sea porque alguien de la familia padece o es portador de un trastorno de sangre, es recomendable realizar la prueba antes de comenzar una familia.
Habla con tu médico de cabecera para solicitar una prueba de sangre, o visita un centro local de talaseis y células falciformes.